El correo electrónico puede parecer muy informal a veces, así que muchas personas olvidan las relgas elementales de la cortesia. Aquí te ofrecemos algunos consejos para que tú no caigas en ese trampa:

• Usa las mayúsculas y la puntuación como lo harias en la escuela; esto vuelve tus mensajes más fáciles de leer.

• Empieza tus mensajes electrónicos con un saludo.

• Escribe un tema específico en el cuadro "Asunto" para que tu destinatario sepa de qué se trata el mensaje y para que no se confunda con correo basura.

• Guarda los correos que consideres importantes, luego te pueden servir para comprobar o recordar algo.

• Finalmente, recuerda que las quejas o conflictos se arreglan mejor en persona. Los mensajes electrónicos no  tienen  claves de contexto, como tono de voz o expresiones faciales, y es fácil que la gente interprete las cosas de una manera incorrecta.

La mensajeria instantánea es incluso más informal que el correo elctrónico, y la gente suele usarla más para conversar con amigos y parientes. Con todo, recuerda ser cortés. Antes de enviar un mensaje, hazte estas preguntas:

• Le diría esto a alguien en persona?

• Cómo me sentiría yo si recibiera este mensaje?

• Me preocuparía que esta persona guardara el mensaje y se lo enviara a alguien más?